¿Qué pasa con el offshore en USA?

Grandes proyectos cancelados, promotores a los que no les salen los números, la cadena de suministro viendo sus inversiones peligrar, los reguladores sin ser capaces de incentivar el negocio…parece que en el último año todo son malas noticias para la eólica offshore en USA. ¿tan grave es la situación? ¿Cuáles son las causas? Hoy nos zambullimos en las turbulentas aguas del offshore USA.

 

Empecemos haciendo un breve repaso a los acontecimientos más relevantes

 

Proyectos cancelados

No ha sido un buen año para el sector eólico offshore en USA. En Noviembre explotaba la bomba cuando Orsted anunciaba la cancelación de 2 de sus proyectos estrella en USA: Ocean Wind I y II. En total eran 2250 MW que se iban a construir en las costas de New Jersey e incluso antes de comenzar su instalación, ya han provocado más de 2.600m€ de pérdidas para Orsted, la provisión de otros 1.000m€ por penalizaciones y la salida de sus principales directivos.

 

PPAs cancelados

Equinor y BP anunciaban recientemente que cancelaban todos los acuerdos relacionados con Empire Wind 2 (1200 MW) para hacer un “reset” del proyecto.

 

Avangrid (Iberdrola) también ha visto que no salían las cuentas en sus proyectos USA y ha cancelados los PPAs de Park City Wind (840 MW) y Commonwealth Wind (1.232 MW). Estas cancelaciones le han costado a Avangrid un total de 64m$.

 

Hace sólo unos días, Orsted cancelaba el PPA con el estado de Maryland de su projecto Shipjack Wind (966 MW)

 

Pero no sólo son los developers los que cancelan los PPAs por ser demasiado bajos sino que el estado de Rhode Island decidió en Julio no seguir adelante con el PPA de Revolution Wind 2 (1.000 MW) por considerar que el coste era excesivo.

 

Fábricas canceladas

Siemens Gamesa anunciaba en Noviembre que abandonaba sus planes de construir una fábrica de palas offshore en Virginia. Esta fábrica estaba pensada para suministrar palas a, entre otros, el mega proyecto de Dominion de 2,6 GW en las costas de Virginia.

 

¿Cuáles son las causas?

 

Pues básicamente los costes han subido tanto que a nadie le salen las cuentas. Cuando se firmaron los PPAs, los developers hicieron unas estimaciones de evolución de costes que claramente no se han cumplido. Cuando ha llegado el momento de ejecutar el proyecto, se ha visto que los ingresos necesarios para cubrir los costes son mucho mayores.

 

Los developers han intentado renegociar los PPAs con bastante poco éxito y sólo les ha quedado la opción de cancelar los acuerdos pagando una penalización como ha hecho Avangrid o incluso cancelar el proyecto incurriendo en grandes pérdidas como ha hecho Orsted.

 

¿Tan bajos son los PPAs en USA?

 

No, de hecho son bastante más altos que en Europa. Como se puede ver en la tabla resumen del informe del DoE sobre el mercado offshore en USA, hay muchos proyectos que superan los 100 $/MWh a precio actualizado.

 

Llama la atención que el cancelado Ocean Wind 1 sea uno de los proyectos con el PPA más alto y pese a ello, Orsted haya preferido cancelarlo aun soportando unas pérdidas millonarias. Esto ya nos indica que el caso de negocio debía de ser muy negativo, por lo que queda claro que los costes están disparados y que probablemente la gestión del proyecto no ha sido la mejor.

 

Además, no hay que olvidar que gracias al Inflaction Reduction Act (IRA), existen ayudas extra para los proyectos, ayudas que se ven incrementadas si se cumplen unos requisitos de contenido local.

 

Pero está claro que ni aún con las ayudas del IRA salen las cuentas. De hecho, desde Junio de 2022 no se firma ningún nuevo PPA y la mayoría de los firmados se están intentando renegociar (o cancelar como ya hemos visto). Los estados también están tomando medidas ya que la cancelación de proyectos pone en peligro su planificación energética y su objetivos de descarbonización. Una de las medidas es incluir cláusulas de actualización por inflación en futuros PPAs.

 

El estado de Nueva York anunció que iba a volver a subastar los PPAs de sus proyectos para que los developers pudieran actualizar los precios.

 

¿Y por qué los costes son tan altos?

La subida de costes en el sector ha sido muy importante a nivel global. Esto ha provocado los graves problemas financieros de los fabricantes y de parte de la cadena de suministro. Pero al contrario de lo que hemos visto en el onshore, donde los developers han conseguido transferir gran parte de los riesgos de dicha subida a la cadena de suministro, estamos viendo que en el offshore (y en USA en particular) son los promotores de los proyectos los que están sufriendo la subida de costes.

 

No hay datos concretos de subidas de costes pero hay varios factores importantes a tener en cuenta:

 

  • Subida de precios de los OEMs

Probablemente cuando los developers hicieron sus estimaciones de costes, supusieron que los precios de las turbinas iban a seguir bajando indefinidamente pero no ha sido así. Vestas, Siemens Gamesa y GE ya han dicho por activa y pasiva que han subido precios y que incluso están renegociando contratos ya cerrados. Esto sin duda ha afectado a los proyectos en USA.

 

  • Jones Act

La famosa Jones Act establece que sólo barcos construidos y con bandera estadounidense pueden transportar material y personas entre puertos nacionales. Esto hace que todos los barcos utilizados en la construcción y mantenimiento de los parques tengan que ser locales. Esto no es nuevo, pero probablemente se subestimaron los costes de los nuevos barcos.

 

Actualmente hay 8 barcos disponibles y otros 28 anunciados o en construcción. Como referencia, uno de estos barcos puede llegar a costar más de 500m$ y su construcción puede llevar años.

 

  • Altos precios pagados por los developers

Como se puede ver en la tabla publicada por el DoE, los precios pagados por las zonas de New Jersey y New York fueron altísimos comparados con el resto de zonas

 

 

No es casualidad que estos sean los proyectos que se están cancelando y resubastando.

 

  • Aumento de tipos de interés

En proyectos que son intensivos en capital, cualquier alza en el precio del dinero tiene un impacto muy grande. La mayoría de los proyectos USA se gestaron con el precio del dinero en mínimos y los tipos actuales.

 

 

¿Y la cadena de suministro?

Como de costumbre, los fabricantes y suministradores están sufriendo los retrasos y las dudas en el mercado. Las inversiones que se están realizado para montar una cadena de suministro local son enormes y cualquier retraso o cancelación tiene un impacto muy grande.

 

Como ejemplo, como consecuencia de la cancelación del PPA de Empire Wind 2, BP y Equinor han cancelado el contrato de la subestación offshore con Seatrium. Pero todavía más llamativo fue el caso del fabricante de subestructuras EER, que empezó a fabricar los monopilotes de Ocean Wind 1 en su fábrica de New Jersey antes de la noticia de la cancelación del proyecto por parte de Orsted.

 

 

 

Y aunque a buen seguro, Orsted tendrá que abonar a EER parte del contrato, la realidad es que la fábrica va a estar infrautilizada hasta que haya volumen que rellene el hueco dejado por OW1.

 

También los OEMs han visto afectado su pipeline en USA, especialmente GE y Vestas que han visto como 2 de sus principales proyectos se han cancelado

 

 

Pese a las malas noticias, el sector sigue invirtiendo en la cadena de suministro offshore. Además de los 28 barcos citados anteriormente, la inversión en puertos y fábricas también está siendo importante, sumando casi 1.000m$ desde Junio 2022. Además, hay que recordar que el IRA ha introducido una ayuda a la fabricación local de componentes eólicos.

 

 

¿Nos quedamos sin offshore en USA?

 

No, de ninguna manera. Todas estas malas noticias van a provocar retrasos en los proyectos y posiblemente la cancelación de los menos viables, pero el sector lo superará. De hecho, el pipeline de proyectos sigue creciendo (un 15% en 2023 según el DoE) y como acabamos de ver, las inversiones no se han parado. Hay nuevas zonas como el golfo de México que están asignando áreas de desarrollo y el offshore flotante está arrancando en California.

 

Los 2 primeros parques serie, Vineyard Wind 1 (800 MW) y South Fork Wind (132 MW), están en plena construcción y se unirán a los actuales en operación Block Island (30 MW9 y CVOW pilot (12 MW). Vineyard Wind ya ha producido sus primeros MWh como se ve en este vídeo mientras que South Fork ya lo hizo hace unos meses.

 

 

Como ya pasó en los inicios del offshore en USA allá por el 2005, posiblemente se han subestimado las complejidades inherentes al sector offshore. Adicionalmente, el mercado USA tiene unas peculiaridades que lo hace más complejo aún. Los proyectos actuales están pagando la necesidad de construir una cadena de suministro local en un momento de incremento de costes y altos tipos de interés. Pero no hay duda que hay determinación por tener un sector fuerte, con ayudas e involucración por parte de las instituciones y un pipeline de proyectos reales.