Lo más destacado de WindEurope 2024

El pasado 20,21 y 22 de marzo tuvo lugar en Bilbao la WindEurope 2024, feria y conferencias eólicas de referencia en Europa organizadas por Windeurope. Como en anteriores ocasiones, aprovechando el privilegio de que se celebre en Bilbao, nos dimos una vuelta por el BEC para tomar el pulso al negocio eólico y, por supuesto, saludar a amigos y colegas del sector.

 

Por tercera vez en los últimos 5 años, WindEurope volvía a Bilbao para celebrar su evento anual. La organización esperaba más de 12.000 asistentes, unos 3.000 más que en la anterior edición en 2022, y lo cierto es que se notaba mayor afluencia en general, con más gente en la zona de exhibición y con las conferencias abarrotadas. Hay que decir que para ser un evento internacional, es pequeño en comparación con otros como la WindEnergy Hamburg (40.000 asistentes) o el evento solar SmartE Munich (120.000 asistentes). Pese a ello, parece que hubo ciertos problemas logísticos y de infraestructuras en la ciudad de los que se hizo eco Sergio Fdez Munguía en su edición especial de Windletter sobre la feria, muy recomendable por cierto.

 

Pero dejémonos ya de preliminares y vayamos a lo más destacado que vimos y oímos durante el evento.

 

Salvar al soldado “industria eólica europea”

 

Sin duda el tema estrella de la feria fue la industria europea eólica y cómo apoyarla para que crezca y sea el motor de la descarbonización del continente.

 

Sobre el papel parece un mensaje claro y diáfano. WindEurope lo resumió en su “our wind, our value” y no cabe duda de que la inmensa mayoría de los asistentes apoyábamos el mensaje. Pero hasta ahí llega la unidad dentro del sector. Cuando se profundiza en medidas concretas para proteger a la industria, comienzan la disparidad de visiones y cada uno defiende su “agenda propia”.

 

Mientras los OEMs europeos piden limitar la entrada de los fabricantes chinos, como resumió el CEO de SiemensGamesa con su frase “We need to make sure wind’s dependencies are not too big”, hay muchos fabricantes de componentes que critican el doble juego de los OEMs pidiendo protección frente a los competidores chinos pero al mismo tiempo, trasladando su cadena de suministro a China. Y por si faltara poco, los grandes desarrolladores no quieren ni oír hablar de que su capacidad de elegir proveedor se vea limitada ni de que sus casos de negocio se vean amenazados por la obligación de comprar más caro.

 

En realidad, todos tienen razón y aunque parece difícil contentar a todos, la respuesta la tenemos al otro lado del atlántico: una legislación como el Inflaction Reduction Act ataca las 3 sensibilidades: incentiva al comprador para compara producto local, se asegura de que el producto local tenga componentes también locales y ayuda al que fabrica localmente.

 

Los políticos europeos tampoco lo tienen claro

 

Una de las características de este evento es que hay gran representación institucional de la UE y de gobiernos europeos. De hecho, en las conferencias hubo mucha presencia de ministros y altos cargos de energía de países europeos además de representantes de los principales partidos europeos y además de mucho discurso “político” bastante superfluo, lo que quedó claro es que no hay una idea única de cómo apoyar a las renovables y a la eólica en particular.

 

Había políticos de países con gran peso en la industria eólica como Alemania o España que abogaban claramente por medidas de protección mientras que otros países sin esa industria, lanzaban mensajes más en línea con acelerar la instalación de renovables con fuentes diversificadas. Incluso hubo intervenciones diciendo que quizás había que ir más despacio para no poner en riesgo la competitividad europea en general…total, que aunque el mensaje de la UE es claro, sospecho que la famosa “trasposición nacional” va a depender mucho de la agenda local de cada gobierno.

 

 

Por el momento, España parece ser de los países que más claramente apuesta por hacer algo y de hecho, durante la feria se realizó la firma protocolaria del spanish wind charter, la versión nacional de la WPAP (ver post sobre el WPAP). Al documento firmado le falta cierta ambición e incorporar sugerencias del sector, pero es sin duda un punto positivo.

 

 

Más allá de los detalles, queda patente lo difícil que es logar una postura común en Europa, incluso en temas en los que casi todos estamos de acuerdo en lo esencial.

 

OEMs: la alegría va por barrios

 

El otro tema estrella de Windeurope era la recuperación de los OEMs (o de algunos de ellos al menos). El stand de Vestas rebosaba optimismo y actividad frenética, reflejando perfectamente lo que es ahora mismo el sentimiento en el líder eólico. Además, me gusta mucho cómo Vestas ejerce de líder del mercado lanzando mensajes sectoriales con contenido muy interesante y muy bien trabajados. Durante esta feria, lanzó la campaña “turn auctions into actions”, una serie de recomendaciones para hacer las subastas más eficientes. Una de las sugerencias me parece rompedora: beneficios compartidos. Quizás otro día hablemos más en profundidad de este documento. Siguiendo por el barrio del optimismo, estaba Nordex anunciando contrato de 800 MW con RWE y con gran presencia en el evento gracias al omnipresente Jose Luis Blanco que se tuvo que multiplicar para atender los compromisos como CEO, los de presidente de WindEurope y todavía le quedó tiempo para saludar y charlar con colegas y conocidos del sector.

 

GE Vernova llamó la atención por su stand tipo bunker, cuyo diseño parecía hecho para espantar potenciales visitantes. La compañía está en pleno proceso de spin-off tratando de encontrar la forma de volver a la rentabilidad, con el negocio offshore lastrando al resto.

 

 

Y por último Siemens Gamesa, quien últimamente tiene que estar en las ferias en modo “al mal tiempo, buena cara”. Sin buenas noticias que dar, sin producto que vender, con pocas respuestas a las muchas preguntas que hay en el mercado, es de 10 la actitud y el trabajo de los grandes profesionales de la compañía. Mucho ánimo desde aquí que vendrán mejores tiempos.

 

El offshore por fin es una casi una realidad en España

 

Una de las grandes novedades positivas de la feria fue sin duda el offshore. Con la primera subasta en España casi a la vista (no hay fecha pero parece que va a ser este mismo año), por fin el sector empieza a hablar de proyectos y negocios reales en España. En ferias anteriores en Bilbao, no dejaba de ser una presencia testimonial e institucional pero en esta ocasión, se notaba mucha más actividad.

 

Mención especial a Navantia/Windar, un verdadero líder del sector offshore que celebró durante la feria el segundo aniversario de su marca Navantia Seanergies. Mucho mérito lo que están consiguiendo, con presencia en los principales proyectos offshore y gran crecimiento. También a Saitec que jugaban en casa y que por fin tienen su prototipo flotante de 2 MW operando en la costa vizcaína.

 

Pocas (o ninguna) novedad de producto

 

La única novedad de nueva turbina fue la Enercon E-175 EP5 cuya potencia nominal se ha subido a 7.0 MW. El resto de fabricantes siguen la (acertada) política ya anunciada de ralentizar el ritmo de desarrollos a fin de fiabilizar y rentabilizar sus actuales plataformas.

 

En cuanto al desarrollo de Enercon, realizaron una presentación en el stand muy interesante mostrando las novedades de la turbina. La única novedad respecto a lo presentado en el pasado Husum era el uprate a 7 MW. Aunque sea direct drive, lejos han quedado los tiempos del generador de anillos rozantes con excitación externa y los diseños actuales de Enercon son cada vez más mainstream, con generador PMG con rotor externo (como SGRE en sus modelos offshore). Ya es historia la tradicional nacelle con forma de huevo y a partir de ahora nos acostumbraremos a ver el inmenso disco del generador con el contenedor de la e-nacelle detrás.

 

 

Es impresionante el generador modular en 2 piezas para poder ser transportado en camión. hasta 2026 no veremos este diseño pero la verdad es que es espectacular

 

 

 

Mucha competencia de hubs eólicos regionales

 

Creo que esta es la edición en la que se han visto mayor número de pabellones regionales o nacionales. Dinamarca, Irlanda, Francia, Noruega, UK, Holanda…sin duda, hay mucha competencia en Europa por hacerse un hueco en este sector y por ello debemos valorar y cuidar lo que tenemos en casa: el cluster de energía de Euskadi jugaba en casa y sacó pecho y juntó a 45 empresas en sus stands compartidos. También la industria navarra tuvo presencia con un stand compartido para 6 empresas (con Nabrawind e Industrial Barranquesa entre ellas) y otras 3 con stand propio.

 

 

En conclusión, gran evento, organización de diez, el BEC es un recinto de los mejores de Europa y es una suerte que Windeurope venga a Bilbao con tanta frecuencia. En esta edición se ha respirado un ambiente de mayor optimismo. La industria sigue atravesando momentos difíciles pero sin duda la situación general es mejor que hace 2 años y casi todo el mundo confía en que seguirá mejorando.